Buenos días, ¿qué tal el comienzo de semana? Por Sevilla, nos quedan días y días de lluvia. Y como una de las mayores preocupaciones de nuestras novias es si lloverá el día de su boda, aquí va el post de hoy:

Lo mejor es pensar en positivo y creer que el día de tu boda va a estar bueno, y si no, algo bueno pasará.

HUEVOS A SANTA CLARA

Una tradición centenaria española es la de llevarle huevos a Santa Clara para pedirle buen tiempo para el día del casamiento. La futura esposa alcanza una docena de huevos al monasterio de Clarisas Franciscanas más cercano y las religiosas le piden a Santa Clara, en nombre de la novia, la gracia de un día lindo para celebrar sus nupcias. Santa Clara fue una religiosa italiana que vivió en el siglo XIII, en Asís. Es la protectora de la paz en el matrimonio, pero su nombre se ha asociado al “tiempo claro”.

BODA AGUADA

Un ejemplo bastante reciente del apego a la tradición de llevarle huevos a Santa Clara, fue la boda real del Príncipe de Asturias con Letizia Ortiz. Una persona de confianza de la Reina Sofía llevó “una docena de huevos” al convento de las madres Franciscanas Clarisas, situado en el paseo de Recoletos de Madrid.

Sin embargo, a pesar de todas las previsiones, la lluvia -y el granizo en algunos momentos- no tuvieron piedad de los príncipes; el temporal se descargó justo antes de la ceremonia del 22 de mayo de 2004. El príncipe Felipe de Asturias y la Reina tuvieron que aligerar la marcha en los últimos metros de la alfombra roja debido a la lluvia. Al momento de la entrada de Letizia era tal la intensidad del temporal que la princesa se vio obligada a llegar en un Rolls Royce hasta la puerta de la Catedral de la Almudena. Parece que tanta agua les trajo suerte a los príncipes de Asturias, ya que en su casi quinto año de matrimonio ya tienen dos hijas.

Existe otra versión que sostiene que si las nupcias se celebran un día de lluvia, la pareja tendrá muchos hijos.

PLAN B

Aunque te cases en Agosto tienes que tener prevista una buena opción B o en caso de lluvia. No te olvides de ella. Por mucho que te guste el jardín donde tienes previsto celebrar tu boda, tienes que valorar que la opción B sea decente. A veces, no se piensa en el caso que llueva y hay que valorarlo por la estética y posible incomodidad de tus invitados. Espacios separados sin estar cubiertos; debéis de preveer paraguas para todos, alfombras para el barro en zonas de jardín, etc.

“Novia mojada, novia afortunada”

¿ Qué os ha parecido el post?

¡¡¡ Qué tengáis buen día!!!

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